A raíz de los estragos económicos y sociales que ha dejado, y sigue dejando, la pandemia del SARS-CoV-2. diversos gobiernos están planteando una recuperación sostenible, pero en México ni se ha tocado el tema… y no es de sorprenderse con un presidente que no se toma en serio las repercusiones que dejará esta pandemia.
Greenpeace actúa y entrega plan de recuperación
Debido a la inacción y pasividad del gobierno mexicano, la organización ambiental Greenpeace solicitó un plan de recuperación económica con justicia y protección al medio ambiente, el cual entregó en Palacio Nacional en la víspera del 2do informe presidencial.
El grupo de activistas de Greenpeace, entregó en Palacio Nacional una misiva con la demanda -firmada por más de 35 mil mexicanos- de un plan de recuperación del país que no olvide incluir políticas transversales para la protección del medio ambiente.
Con un sobre de dos metros de largo dirigido al presidente López Obrador (para que no se le vaya a traspapelar), las activistas se presentaron ante la Oficialía de Partes para llevar la petición de integrar la visión ambiental en el proyecto económico del gobierno mexicano para hacer frente a los efectos de la pandemia ocasionada por el Covid-19.
“...La búsqueda de una recuperación es una gran oportunidad para dirigir los esfuerzos nacionales hacia la construcción de un México justo y verde. En ese sentido, el cuidado del medio ambiente y el combate al cambio climático deben ser parte de todas las políticas públicas de este gobierno, con mayor énfasis en los sectores energético, agroalimentario y de transporte, tres sectores clave para la recuperación socio-ambiental y económica del país...”, señaló Aleira Lara, directora de campañas de Greenpeace México.
Es necesario impulsar cambios que permitan la reducción de emisiones contaminantes para combatir el cambio climático y hacernos más resilientes ante la emergencia climática, una crisis más profunda que la que estamos pasando actualmente.
“...En el sector agroalimentario se debe Impulsar la transición hacia la producción agroecológica que garantice los derechos de campesinas y campesinos a un trabajo digno, a un medio ambiente sano, a la salud y a la libre determinación, y que asegure la soberanía alimentaria de las y los mexicanos a través de alimentos sanos, ecológicos y accesibles para toda la población....”, establece la petición.
Si bien, apoyamos en esta parte a Greenpeace en otorgar condiciones laborales justas para quienes trabajan las tierras; también debemos entender que difícilmente lograremos una seguridad alimentaria si dejamos a un lado los transgénicos, los cuales son necesarios para alimentar a cerca de 8 mil millones de bocas.
Un punto más complicado, debido al desdén que tiene el presidente López Obrador, es la energía renovable. Debemos migrar cuanto antes a las energías limpias y aumentar la aportación de renovables a la matriz energética, asegurando que la implementación de proyectos renovables se dé con estricto respeto a los derechos humanos de las comunidades, así como detener el desarrollo de infraestructura basada en combustibles fósiles.
“...También es indispensable aumentar el presupuesto para adaptación y mitigación para poder alcanzar las metas nacionales de transición energética y disminución de emisiones como lo demandan las leyes de Cambio Climático y de Transición energética y las metas internacionales de las contribuciones nacionalmente determinadas (NDC) del acuerdo de París…”, de acuerdo con la carta.
Finalmente, en el tercer rubro está el transporte. México tiene un transporte público con diversas áreas de mejora y no puede existir una recuperación justa sin preservar el espacio vial para las modalidades de viaje más eficientes: caminar, el uso de la bicicleta y el transporte público eléctrico con medidas especiales, como carriles restringidos en las avenidas principales para que estas modalidades más eficientes muevan al máximo número de personas sin tráfico.
“..Es necesario fomentar la renovación del transporte público para adquirir autobuses eléctricos en las zonas metropolitanas e implementar redes de ciclovías en las ciudades del país a partir de infraestructura adecuada, en vías primarias y secundarias…”, puntualizó.
Por último, Aleira Lara afirma que el Presupuesto de Egresos federal para 2021 debe incrementarse en el rubro ambiental, con especial atención a los efectos del cambio climático.
¿Será que el presidente escuche peticiones?
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Vía: Greenpeace
Imagen: Greenpeace
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