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McDonald's admite que su popotes de papel no se pueden reciclar


Cuando quieres ser una empresa ambientalmente responsable y fallas en el intento. En junio del 2018, McDonald’s, el gigante de la comida rápida, anunció que cambiaría los popotes de plástico por popotes hechos de papel en los mil 361 restaurantes localizados en Reino Unido; la medida sería un piloto para conocer si funcionaría en el resto del mundo y… pues no.

La iniciativa fue bien recibida por los consumidores y por quienes queremos ver un mundo sin plásticos; lamentablemente el reemplazo fue un fracaso ya que recientemente McDonald’s admitió que los popotes de papel no son reciclables… mientras que los anteriores si lo eran.

Con esto no queremos que McDonald’s regrese a los popotes tradicionales de plástico, sino que se esfuerce más; existen diversas opciones biodegradables que pueden reemplazar el plástico y este nuevo papel no recicable, solo es cuestión de invertir, cosa que ‘Ronald’ parece no estar dispuesto a hacer.

Los popotes de papel ‘ecológicos’ fueron distribuidos en los restaurantes de McDonald’s del Reino Unido, en un intento por "proteger el medio ambiente" después de una “prueba exitosa”.

Sin embargo, McDonald’s afirmó el lunes que los nuevos popotes son demasiado gruesos para ser procesadas por sus socios de reciclaje.

"...Si bien los materiales son reciclables, su grosor actual hace que sea difícil que sean procesados por nuestros proveedores de soluciones de residuos, que también nos ayudan a reciclar nuestros vasos de papel...", dijo un portavoz de la compañía a la agencia de noticias Press Association.

El problema de los popotes fue que en la prueba se usaron popotes más delgados y efectivamente si resistieron, pero fueron reforzados después de que clientes alegaron que se desintegran antes de que pudieran terminar su bebida; adicional a que era más difícil beber líquidos más espesos como batidos.

Un memorando interno filtrado, publicado el domingo por el periódico británico The Sun, dijo que los nuevos popotes serían desechados y quemados, en lugar de reciclarlos, regalarlos, donarlos o cualquier otra medida.

"...Los popotes de papel aún no son reciclables y deben desecharse en la basura en general hasta nuevo aviso...", dice el memorando.

Sin embargo, el portavoz de McDonald's dijo el lunes que la compañía estaba trabajando para encontrar una solución, por lo que poner los popotes de papel en el desperdicio general es algo temporal.

"...Los desechos de nuestros restaurantes no se depositan en vertederos, sino que se utilizan para generar energía...", agregó la compañía.

El cambio que hizo McDonald’s no fue algo saliera de una sala de reuniones de sus oficinas, más bien fueron ‘obligados’ por el gobierno del Reino Unido el cual en abril de 2018 se comprometió a prohibir los popotes de plástico y bastoncillo de algodón para el 2020.

En su momento, la compañía fue elogiada por muchos, incluyendo al entonces Secretario de Medio Ambiente del Reino Unido, Michael Gove, ahora se ha enfrentado a nuevas acusaciones de "lavado verde" por parte de activistas que dicen que los pequeños efectos en el empaque están eclipsados ​​por los enormes efectos que la producción de carne tuvo en el entorno.

Lo cierto es que de todas formas McDonald’s tiene que hacer el cambio a una alternativa de popotes de plástico por uno biodegradable y reciclable para el 2020, prueba y error, prueba y error.

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Vía. AlJazeera Imagen: McDonald’s

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