Vanuatu, el país insular en el océano Pacífico Sur, y líder en el combate contra la contaminación plástica, ahora suma una victoria más.
Por su ubicación, la nación sufre graves consecuencias de la crisis climática que estamos viviendo, de hecho es la región más vulnerable del cambio climático. En Vanuatu el nivel del mar aumenta más rápido que en cualquier otra parte del mundo. El promedio está en 6 milímetros al año desde el año 1993 (11 centímetros en total).
Adicional, al ser un país tan aislado, el problema de la basura se convierte en una auténtica pesadilla y los plásticos un gran enemigo que vencer.
Desde el 2018, el Gobierno de Vanuatu aprobó limitar al máximo el uso del plástico en su territorio de más de 80 islas que se extienden en el Pacífico e implementó medidas para regular la gestión de la basura.
Ya está prohibido fabricar, vender o distribuir bolsas de plástico de un solo uso, popotes de plástico, contenedores de poliestireno, a excepción del que se usa para envolver y transportar carne o pescado, ahora es el turno de los pañales.
El Gobierno además se encuentra en un proceso de consulta con los operadores privados de basura para que obtengan licencias para operar en los vertederos, centros de reciclaje y de tratamientos de aguas, entre otros.
Ahora, Vanuatu lleva su lucha contra el plástico a otro nivel y se convierte en la primera nación en proponer una prohibición de los pañales desechables, que se introducirá gradualmente a fines de este año.
Vanuatu fue aclamada como una nación "campeona", una de las 12 que están avanzando para enfrentar los desafíos de emergencia climática y oceánica.
La propuesta radical de prohibir los pañales desechables, que contienen plástico y pueden tardar cientos de años en degradarse, ha causado un gran revuelo entre los padres del país, quienes se quejan de que las mujeres, las cuidadoras predominantes de los 20,000 bebés de las islas, son las que estarán más afectadas.
Pero el gobierno dijo que ‘no tener otra opción’.
"...Vanuatu está salvaguardando su futuro. Eventualmente, los plásticos encuentran su camino hacia el agua y la cadena alimenticia, al final del día, la gente de Vanuatu termina consumiéndolos…”, dijo Mike Masauvakalo, del Ministerio de Asuntos Exteriores.
Por el momento, el gobierno se encuentra buscando un reemplazo para ayudar a los padres de familia, pero no han encontrado uno que sea 100% biodegradable y en poco tiempo; aunque se están buscando alternativas de algodón.
"...Es un largo camino por delante, pero conociendo mi país, lo resolveremos. Vanuatu es muy vocal acerca de la emergencia climática. Es visible, lo estamos viviendo. Está afectando nuestro suministro de alimentos y nuestras poblaciones de peces...", continuó.
La prohibición impulsada el año pasado ha traído grandes beneficios al país y está teniendo el efecto deseado al contar con un menor número de residuos plásticos en las calles y playas.
“... A un mes de introducir la prohibición, un estudio de residuos demostró que el 12% de la basura doméstica era de plástico, con sólo el 2% de bolsas de plástico y otros artículos prohibidos. Esto se compara con el 15-18% de plástico en 2010 y 2014…”, dijo.
Otras naciones han tenido las intenciones de realizar esto en el pasado, en el Reino Unido, Michael Gove insinuó una prohibición de los pañales desechables como parte de la represión de los residuos plásticos del gobierno, pero causó un severo descontento y tuvo que desecharse la idea.
De acuerdo con el departamento de protección ambiental de Vanuatu, todavía se necesitan realizar estudios sobre el efecto que traería dicha medida para los padres que trabajan.
El país anunció la prohibición después de que la investigación realizada por el Programa de basura de la Commonwealth (CLiP) mostró que los desechos orgánicos y los pañales desechables representan tres cuartos del peso total de los desechos producidos.
Se está consultando con las empresas para encontrar alternativas locales y con las ONG, la sociedad civil y otros grupos. Los resultados de la consulta, que tendrá lugar del 1 de diciembre de 2019 al 31 de diciembre de 2020, podrían ser replicados en otros países que tiene un alto consumo de pañales desechables… como México. __ Vía: The Guardian Imagen: iStock