Después de una larga espera, el Parlamento Europeo ha votado a favor de una prohibición completa de una gama de plásticos de un solo uso en toda la Unión en un intento por detener la contaminación de los océanos.
Popotes, cotonetes, agitadores, cubiertos y envases de plástico quedarán prohibidos a partir del 2021, mientras que el 90% de las botellas deberán ser recogidas de forma selectiva para el 2025.
La propuesta también pide una reducción en el plástico de un solo uso para envases de alimentos y bebidas, como vasos de plástico. Una investigación de la Unión Europea afirma que cada año se arrojan más de 150 mil toneladas de plástico en aguas europeas.
Eso es solo una gran batalla en la guerra contra el plástico, ya que de acuerdo con la ONU, más de 13 millones de toneladas de plástico entran a los océanos cada año.
Después de que la votación del Parlamento fue respaldada por 571-53, el eurodiputado responsable del proyecto de ley, Frédérique Ries, dijo que era "una victoria para nuestros océanos, para el medio ambiente y para las generaciones futuras".
Si bien no están prohibidos todos los plásticos, la ley está dirigida a los plásticos más comunes que contaminan los océanos y que cuentan con una alternativa biodegradable disponible.
Los plásticos escogidos representan entre el 80% y el 85% de los objetos encontrados como basura marina en las playas europeas. Y los 10 plásticos de un solo uso más habituales representan el 86% de todos los artículos de plástico de un solo uso.
Los países miembros deberán adoptar medidas para lograr una reducción del 25% en el consumo de envases de alimentos y vasos para bebidas (hamburguesas, bocadillos, frutas, verduras, postres y helados).
Los eurodiputados también abordaron las enmiendas a los planes para los filtros de cigarrillos, basura común en playas y alcantarillas. Los fabricantes de cigarrillos tendrán que reducir el plástico en un 50% en 2025 y en un 80% en 2030; una colilla puede contaminar entre 500 y 1,000 litros de agua y, abandonada en un cuerpo de agua, puede tardar hasta doce años en degradarse.
En el último momento, se han incluido también los productos fabricados con plásticos oxo-degradables (por no ser biodegradables ) y los envases de comida inmediata de poliestireno expandido (unicel).
Otro objetivo es asegurar que el 90% de todas las botellas de bebidas plásticas se recojan para ser recicladas para 2025. Actualmente, las botellas y sus tapas representan alrededor del 20% de todo el plástico marino, según el informe del Parlamento Europeo.
Otro capítulo establece que los recipientes de bebidas de un solo uso únicamente podrán comercializarse si sus tapas y tapones permanecen unidos a ellos, lo que requerirá regulaciones industriales.
Los artículos como toallas húmedas, compresas y tampones -responsables de generar bloqueos y gastos millonarios por mantenimiento en sistemas de aguas residuales- deberán incluir en su empaque información clara y legible sobre el modo de eliminación y el impacto ambiental negativo en el que incurren.
De igual manera, las empresas que comercialicen productos de plástico verán ampliada su responsabilidad y tendrán que afrontar costos de la gestión para propiciar el reciclaje y limpieza de residuos.
Lo que faltó fue contemplar impuestos sobre el plástico, iniciativa que forma parte del debate público en Bruselas sobre estos materiales contaminantes y que se podría usar para proyectos ambientales, pero aún así, es un gran paso el que ha dado Europa para combatir el plástico.
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Vía: BBC Imagen: Getty Images