Refrescos, cervezas, agua y hasta jugos, son algunas de las bebidas que se venden en empaques de 6, 8 0 12 unidades y vienen unidas con un producto bastante nocivo para la vida marina: los anillos de plástico.
Este empaque tiene la función de hacer más práctico el llevar más unidades pero al estar elaborado de plástico resistente para soportar el peso de la bebida, es un tipo de plástico que se degrada en más de 100 años y por tan sólo un par de minutos de uso.
Es por esto que un equipo mexicano multidisciplinario se embarcó en un proyecto para desarrollar un packaging biodegradable que funcionará como la opción sustentable para dejar de usar los anillos de plástico en los empaques de seis bebidas.
Todo comenzó cuando a uno de los socios fundadores de E6PR (Eco Six Pack Ring), estaba en una playa trabajando en un shooting comercial y fue cuando se le ocurrió la idea de inventar algo que sustituyera los anillos de plástico, que se biodegradara fácilmente y fuera compostable.
“...Después de intentar varias opciones, logramos un producto que es biodegradable y compostable el cual se realiza, entre otros materiales, con desechos que deja la producción de cerveza…”, dijo Juan Francisco García, co-fundador y COO de E6PR.
Este es un ejemplo de economía circular, ya que el equipo buscó materiales que no se estuvieran aprovechando para crear sus anillos.
“...Utilizamos la paja de la planta con la que se hace el grano y con la que después se fabrica la cerveza. Adicionalmente podemos utilizar el mismo grano que desecha la industria de la cerveza que está adentro de la patente y permite utilizar todos estos desechos que no aprovechan...”, asegura García.
El equipo tuvo su primer prototipo en el 2016, el cual lo inscribieron al concurso Cannes Lions en Francia. “...El producto, antes de llegar allí, era ya un boom en redes sociales y medios. Y en el concurso ganamos tres premios. Nos dimos cuenta que no solo habíamos inventado un producto bastante bueno, sino que había una oportunidad de transformar la industria del empaque y de las bebidas...”, reconoce el COO de E6PR.
Viendo el éxito de su prototipo, los emprendedores decidieron tomar las cosas más allá e iniciaron una aventura de casi dos años en investigación y desarrollo para lograr una producción en masa.
“...Hoy en día puedes ver un montón de productos innovadores en redes sociales que se ven padrísimos, pero cuando lo quieres llevar a producción en masa, que sea eficiente en costos y que se puedan escalar, que lo puedas producir y que funcione, pues ya es todo un reto. A los clientes no les importa si es plástico o si es ecológico, quieren el mismo desempeño que el plástico. Lo trabajamos, lo mejoramos, buscamos que el costo no sea muy alto, pero también que fuera compostable, no fuera tóxico...”, asegura García.
A inicios de este año, tuvieron su primer gran ‘break’ e hicieron el lanzamiento oficial de sus anillos con la cervecera SaltWater en Miami.
“...Tuvimos muy buen resultado, ningún problema en el canal de distribución, retail y una vez que probamos el producto con ellos, empezamos ya ventas a diferentes países como Sudáfrica, Australia y otros estados de Estados Unidos. Hasta ahora se ha desempeñado muy bien...”, afirman esperanzados García y Ricardo Mulás, CFO de E6PR.
De acuerdo con datos aportados por E6PR, utilizando los anillos ecológicos se están evitando aproximadamente 5 toneladas de plástico al mes.
Cuando se desecha correctamente, el E6PR encuentra su camino hacia una instalación compostable, donde se degradará en días. En caso de que desafortundamente se deje en vías públicas, terreno abierto o en un cuerpo de agua como ríos o mares, se degradará en cuestión de semanas sin causar daños al ecosistema marino.
Lo que sigue en la empresa es continuar disminuyendo el costo de producción y lograr una mayor eficiencia en materias primas. Además, buscan trasladar esta posibilidad eco-friendly a otros modelos.
“...Actualmente tenemos una planta piloto en México dedicada a generar nuevos productos, pero también nuevos materiales. Este producto tiene una escalabilidad enorme y no nos queremos enfocar en un solo material. Vamos a tener que tropicalizar la materia prima según el país donde se está trabajando y las materias primeras que tengamos cerca...”, dijo García.
Una variable que está ayudando al crecimiento y expansión, son los consumidores. Existe una mayor demanda por estos productos ecológicos y una exigencia de los clientes finales tan grandes que empieza a ser una obligación para los productores de cerveza el contar con empaques amigables con el medio ambiente.
Es un doble orgullo, el primero por ser mexicanos y que impulsen al país y la sociedad a creer que se pueden realizar cosas extraordinarias y en segundo lugar, el contar con una alternativa para un producto tan perjudicial; les deseamos todo el éxito, se lo merecen.
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Vía: National Geographic Imagen: E6PR