Tal parece que el destino está alcanzando a la vaquita marina y posiblemente la inminente extinción de este cetáceo sea inevitable.
La Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) puso en marcha una estrategia de recuperación desde el 2017 con la construcción de santuarios y medidas contra la pesca en la zona; pero todo parece que dicha estrategia está fracasando.
Esto después de las declaraciones que emitió este jueves el titular de la Semarnat, Rafael Pacchiano, quien afirmó que en caso de que se extinga la vaquita ‘se tiene todo listo para su clonación’.
“...La estrategia de recuperación de la vaquita marina (Phocoena sinus) no fracasó, ya que se logró obtener material genético, por lo que si el cetáceo más pequeño del mundo se extingue, ya se tiene todo listo para su clonación…”, de acuerdo con Pacchiano.
El titular presentó el balance de su administración en Los Pinos, donde estimó que todavía existen 30 ejemplares de vaquita marina. Pacchiano insistió que la estrategia tuvo logros, “no es un fracaso porque antes prácticamente no la conocíamos”.
Realmente si es un fracaso porque no se están alcanzando los resultados de conservación, lo único que se podría rescatar de la estrategia es que se logró recuperar información valiosa, así como ciertas medidas para retirar redes agalleras.
“...Estamos muy enfocados en el tema de retiro de redes agalleras, es un esfuerzo que no debería cesar nunca y yo esperaría que no se tuviera que llegar al escenario de la clonación, pero ya está todo listo, si es que se requiere...”, dijo Pacchiano.
“...Ya tenemos muestras de tejido y de sangre, tenemos su estructura genética completamente, todo esto está en el Zoológico de San Diego y eso abre las puertas a escenarios que nunca se hubieran pensado antes...”, destacó al referirse a la posible clonación.
Sobre si se llega al escenario de clonar a la vaquita, este no se realizaría en nuestro país, ya que México no cuenta con los recursos para hacer el procedimiento, es por esto que las muestras están en el Zoológico de San Diego.
La situación de la vaquita es crítica debido a que están involucradas organizaciones criminales nacionales e internacionales que se dedican a la pesca furtiva de la totoaba -la cual es vendida en el mercado negro- y la vaquita marina queda atrapada en las redes de estos codiciosos delincuentes.
“...Nos gustaría acabar con la pesca de totoaba, pero es una situación mucho más complicada, pues implica a organizaciones criminales que, además de ese pescado, trafican droga y gente. La batalla la hemos dado, hoy dejamos el país con cerca de 30 vaquitas, un número que los expertos dicen que todavía se puede recuperar…”, finalizó el secretario.
Es difícil aceptar que la vaquita marina vaya a extinguirse pero los escenarios que se tienen no pintan nada bien y la posibilidad de clonarla todavía parece ser un poco ciencia-ficción.
Necesitamos acciones más drásticas para conservar al cetáceo más pequeño, de otra forma tendremos que recurrir a la ingeniería genética para traerla de vuelta, si es que se puede.
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Vía: Milenio Imagen: Archivo Semarnat