Una de las tradiciones con mayor arraigo en México es colocar el nacimiento navideño con distintas figuras: María, José, el borrego, el buey los pastores, entre otros personajes son quienes están presentes en este adorno puede haber más o menos, pero el componente que casi nunca falta es el musgo que simular el pasto verde.
El musgo ha entrado en polémica ya que su conservación se pone en riesgo cada diciembre. Aunque es una bonita tradición que esta planta adorne los hogares, su extracción tiene diversas implicaciones, desde la destrucción de ecosistemas y la erosión del suelo, hasta la pérdida de hábitat para la flora y fauna.
Durante las festividades decembrinas, la extracción y comercialización del musgo aumenta considerablemente, pero esta ‘decoración’ es de un sólo uso, ya que no una vez extraído comienza a descomponerse y terminadas las fiestas termina en la basura; pero a la naturaleza le tomará cerca de 7 años para que la planta vuelva a crecer y en ese tiempo el ecosistema ya habrá sufrido una transformación.
El musgo podría parecer irrelevante para el medio ambiente, pero en México se han clasificado cerca de 836 especies y es vital para evitar la erosión de los suelos, absorber contaminantes y regular la temperatura del suelo. En sí es una pieza clave para el equilibrio ecológico, además de que es el hogar de animales e insectos.
El musgo cumple un rol importante como regulador hídrico gracias a su capacidad para retener agua en tiempos de lluvias lo que impide la erosión y en tiempos de sequías libera la humedad; además actúa como germinador de semillas.
El principal problema es que la mayoría de los consumidores desconocen los daños que supone la extracción de musgo por lo que la venta no ha disminuido y el costo no ha incrementado.
El rollo de 50 cm se puede vender en $15 o $20 pesos y en promedio una familia consume entre 3 y 4 rollos, si multiplicamos esto por millones de familias veremos que el daño que infligimos al medio ambiente es muy alto.
Países como Honduras ya han prohibido esta práctica debido al daño ecológico que presenta, Ecuador impone multas altas y hasta tres años en prisión. En México sólo se puede comercializar si se cuenta con el permiso de la Sermarnat y Profepa. “…La extracción de musgo está regulada por tratarse de un recurso natural esencial para la capación de agua y humedad en bosques…”, señaló la Semarnat.
ser más conscientes y optar por otro tipo de insumos para adornar su nacimientoDe esta forma una inocente y bonita tradición se impone sobre el medio ambiente local y nacional. Dicho esto, no queremos desalentarlos ni que dejemos atrás una bonita tradición, sólo les pedimos como: papel crepé, aserrín verde y café, telas de colores, césped artificial (lo puedes usar cada año), piedras y algodón.
Vía: Reforma
Imagen: Quadratin