México lleva años con una crisis de agua silenciosa, nadie habla de esto y se piensa que nunca colapsará; totalmente falso. La crisis de agua cada día es peor, sólo falta visitar localidades como Iztapalapa al oriente de la Ciudad de México donde viven cerca de 2 millones de personas y se pueden observar cientos de pipas abasteciendo casas y negocios.
La Ciudad de México se está quedando corta de agua y para satisfacer esta demanda se sigue perforando a profundidades inseguras, debilitando los antiguos cimientos y haciendo que el hundimiento sea cada vez más notorio.
Esta escasez de agua se va agravando con el cambio climático. Temperaturas más elevadas y sequías sólo significa mayor evaporación y demanda de agua; por lo que se tiene que buscar agua a distancias más lejanos suponiendo un mayor costo o continuar drenando los mantos acuíferos subterráneos y acelerar el colapso de la ciudad.
En la Ciudad de México, el 70% del agua que usamos viene del subsuelo y la demanda ha incrementado de forma desmesurada, tanto que en los últimos 100 años la ciudad se ha hundido 10 metros.
Esta problemática ya no es de sólo unos cuantos, sino de millones de personas que habitan la ciudad de México, por esto se han realizado numerosos esfuerzos para lograr la supervivencia tanto de las personas como de la ciudad.
Isla Urbana es uno de estos grandes esfuerzos, el cual es un proyecto dedicado a contribuir a la sustentabilidad en México a través de la captación de agua de lluvia.
“…Captar la lluvia nos permite reducir la cantidad de agua que debemos extraer, alentado y quizás eventualmente deteniendo el hundimiento de la ciudad…”, de acuerdo con el sitio de la organización.
El proyecto nació en el 2009, en colaboración con el Instituto Internacional de Recursos Renovables AC en una colonia popular al sur de la CDMX, donde se viven graves problemas de escasez de agua.
“…Nuestro trabajo se ha enfocado en aprender a captar la lluvia de la forma más práctica posible para poder abastecer de agua a comunidades marginadas. De esta forma, a lo largo de los últimos años hemos tenido el gusto de poder trabajar con la plena diversidad de nuestro país, instalando sistemas de captación desde viviendas pequeñas, aisladas en sierras lejanas, hasta en fábricas y negocios del centro de la ciudad de México…”, de acuerdo con Nabani Vera, Director de Comunicación.
Más de 10 millones de mexicanos no cuentan con servicio de agua, tan sólo en la CDMX cerca de 250 mil personas viven sin conexión a la red y millones más tienen un servicio intermitente o reciben agua contaminada.
La apuesta de Isla Urbana es crear sistemas de captación que provean de agua de calidad y abastecer a una familia durante 5 y hasta 12 meses. Si se tiene un buen diseño, el agua recolectada de lluvias puede ser usada para consumo humano.
Cada temporada de lluvias -este año no es la excepción- la CDMX sufre graves daños por las inundaciones debido a la saturación de los drenajes. Lo que busca Isla Urbana es captar esta lluvia para que no se contamine y llene millones de cisternas.
“…La Ciudad de México está categorizada como la tercer ciudad con mayor estrés hídrico en el mundo. Esto es porque extraemos de los acuíferos y ríos mucha más agua de la que los vuelve a recargar. Si mantenemos este ritmo, nuestras fuentes se acabarán en un futuro no muy lejano…”, de acuerdo con el sitio web.
Para evitar esta catástrofe, la organización quiere adaptar los edificios y techos de la ciudad para captar lluvia y extraer menos agua del subsuelo en temporada de lluvias para permitir que los mantos acuíferos descansen.
Adicional a la escasez de agua, la CDMX incurre en gastos descomunales de energía para bombear el agua. Un 30% del agua de la red proviene del sistema Lerma-Cutzamala, esta agua deber ser bombeada a 150 km de distancia y 1 km vertical desde sus cuencas fuera del Valle; la cantidad de energía que se necesita para esta obra es similar al consumo total de la ciudad de Puebla.
En zonas como Iztapalapa, donde el abasto es más deficiente, cientos de pipas alimentan cada día tinacos y cisternas. La captación pluvial se vuelve una necesidad en estas zonas, ya que se evita la dependencia de pipas y se vuelve un ahorro para la economía de cientos de miles de familias.
Desde su fundación en el 2009, Isla Urbana ha sido un éxito. Se han instalado 6,500 sistemas de captación pluvial, beneficiando a 45,500 personas y logrando ‘cosechar’ 590 millones de litros; equivalente a 59 mil pipas de agua.
Es maravilloso encontrar este tipo de iniciativas, que realmente están impactando y cambiando vidas. Si quieres conocer más acerca de este proyecto ingresa a su página www.islaurbana.org
Vía: Isla Urbana
Imagen: Isla Urbana