Los elefantes, una de las criaturas más sorprendentes, más inteligentes y más evolucionadas está en peligro de extinción. Actualmente todas las subespecies de elefantes africanos y asiáticos se encuentran peligran, debido a la pérdida de su hábitat, la caza deportiva y furtiva y últimamente por moda.
Es alarmante hasta dónde puede llegar la estupidez humana. En Myanmar, una nueva moda amenaza con exterminar a los últimos elefantes asiáticos ya que en años recientes los cazadores furtivos están matando a los pocos ejemplares que quedan con el fin de crear productos estéticos de lujo que se venden en el mercado de lujo.
Esta última tendencia en el mercado estético ya emitió una llamada de alerta por parte del Fondo Mundial de la Naturaleza (WWF); en donde la organización afirma que después de ser cazados, la piel de los elefantes se vende seca y mezclada con otros ingredientes para crear cremas para la piel o pulseras de la suerte; en esta historia hay dos grandes rubros de estupidez, primero el que mata al animal para hacer este producto y segundo el que lo compra.
Igualmente los dientes del elefante son molidos hasta convertirse en polvo y se venden como tratamientos faciales para reducir los signos de la edad. Es así como los clientes buscan un remedio desesperado por aferrarse a su juventud perdida, pero realmente estos productos ni siquiera aseguran o pueden hacer lo que dicen.
Si bien la mayoría de los mercados que venden estos productos están en las regiones fronterizas de China, Laos y Tailandia, la demanda en Myanmar comienza a desarrollarse y cada día se suman más clientes a las filas de un milagro que nunca va a suceder.
Se calcula que en Myanmar quedan menos de 2,000 de elefantes y un estudio realizado por la Sociedad Conservadora de la Vida Salvaje estima que se necesitará al menos un siglo para que la población de elefantes en Asia se recupere.
“...Esta moda es perturbadora porque no sólo apunta a elefantes adultos sino a crías y de comenzar a escalar esta tendencia Myanmar se quedará sin elefantes muy pronto…”, así calificó WWF a la moda del país asiático.
De acuerdo con la información de WWF, desde el 2013 se han reportado 110 asesinatos de elefantes, principalmente en las provincias de Bago Yoma y Ayeyarwady Delta, esto es el 5% de la población actual de los elefantes en Myanmar. Esta atrocidad sucede porque la fuerza de seguridad es ineficiente, ya sea porque son doblegados fácilmente por sobornos o porque no alcanzan a cubrir toda la región; cual sea el caso, en los últimos meses las muertes han aumentado considerablemente.
De seguir a este paso, los elefantes asiáticos en Myanmar podrían desaparecer para el 2020 y de ser así la población mundial de elefantes resintirían la pérdida ya que actualmente sólo existen 50 mil ejemplares en todo el mundo.
Vía: Vice
imagen: Matthias Clamer / Getty images