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Nuestras pisadas pueden generar energía limpia en los suelos


Cuando se mencionan las fuentes de energía renovables, casi siempre pensamos en las más comunes como la solar o eólica, pero existen diversas formas de generar energía limpia como con el movimiento… tal es la propuesta de Xudong Wang.

Somos testigos de cómo la elaboración y colocación de pisos ha migrado hacia un camino más verde, aunque en esta ocasión somos nosotros quienes podamos darle un mejor uso a nuestros suelos con nuestras pisadas, ya que un grupo de ingenieros en materiales de la Universidad de Wisconsin-Madison (UWM) han desarrollado un método para convertir nuestros pasos en el piso en energía.

Este novedoso método pone en uso a un material de desecho común: la pulpa/celulosa de madera, el cual es un componente común de los suelos y contiene nanofibras de celulosas. Éstas son unas diminutas fibras que al tratarse con agentes químicos producen una carga eléctrica cuando entran en contacto con nanofibras no tratadas.

Cuando las nanofibras se integran directamente en la mezcla del suelo, son capaces de producir electricidad la cual puede ser aprovechada para lámparas o cargar una batería de teléfono. La pulpa de madera es relativamente barata, abundante y es un producto de desechos renovables de varias industrias; el incorporar este suelo no significa una inversión mayor, de hecho el precio es muy similar a los materiales convencionales.

Esta investigación se basa en usar las vibraciones para generar electricidad. Por años el grupo de ingenieros liderado por Xudong Wang han probado diferentes materiales como un esfuerzo de maximizar las ventajas de una nueva tecnología llamada ‘triboelectric nanogenerator' (TENG). La ‘triboelectricidad’ produce un fenómeno similar al que vemos con la electricidad estática de la ropa.

El progreso logrado por el equipo de Wang es un gran avance en el campo de la investigación de energías verdes y se le ha conoce como ‘roadside energy harvesting’. De acuerdo con diferentes científicos, este método podría estar rivalizando a la energía solar y eólica ya que no depende del clima. Nuestra imaginación viaja y pensamos en calles y autopistas que generen energía con el contacto de los autos, fantástico ¿no? Las personas como Wang que continúan realizando estudios de este tipo, ven al suelo como un gran potencial de energía renovable.

“...Si se quiere crear este tipo de energía es necesario pensar en lugares donde se pueda aprovechar al máximo. Hemos estado trabajando en almacenar energía a partir de actividades humanas, una forma es construir algo donde poner a las personas o construir algo en donde las personas tengan acceso público. Los pasillos con un tránsito afluente, estadios y centros comerciales pueden incorporar esta tecnología y producir una cantidad de energía significativa…” dijo Wang.

El equipo de ingenieros está trabajando en un prototipo educacional que planean instalar en la Universidad, en un espacio donde haya una gran tránsito de personas para poder demostrar su modelo y el aprovechamiento que se puede tener.

Una de las interrogantes es acerca del tiempo de vida que pueda tener el aplicativo y aunque el equipo de Wang todavía no convierte los números de los ciclos en días o años, se cree que pueda durar más que el mismo piso. Los hallazgos encontrados y avances fueron publicados por en el diario Nano Energía el pasado septiembre.

 

Vía: International Business Time y Sciendce Daily

Imagen: news.wisc.edu

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