“…Una de las grandes amenazas para nuestra existencia es la contaminación del medio ambiente y del agua. Muchos países en el mundo han sido víctimas de un deterioro a gran escala en el abastecimiento del agua. En otros países, la escasez de agua ha afectado drásticamente las condiciones de vida, es por esta razones que se necesitan esfuerzos extenuantes en todo el mundo para alterar estas tendencias; dichas medidas tienen que realizarse inmediatamente antes de que sea demasiado tarde…”
Este fue el mensaje inaugural en 1991 cuando se realizó la primer Semana Mundial del Agua en Estocolmo. 26 años después este congreso continúa realizándose con mucho éxito en donde cada año se cambia el tema siendo en este 2016: “Agua para el crecimiento sostenible”. Expertos, practicantes, tomadores de decisiones, innovadores empresariales y jóvenes profesionistas de diferentes sectores y países se dieron cita en Estocolmo para compartir ideas y fomentar nuevas formas de pensar para desarrollar soluciones a los problemas más apremiantes relacionados con el agua de hoy en día.
Este año, el congreso se realizó del 26 de agosto al 2 de septiembre y el programa consistió en más de 140 eventos de diversos formatos en los cuales se cubrieron diferentes tópicos. Las conferencias más representativas fueron las que estuvieron relacionadas con el tema principal de la sustentabilidad del agua, como: financiamiento, Agenda 2030 (la cual es una agenda propuesta por las Naciones Unidades como plan de acción para detener la degradación del planeta, incluyendo un consumo y producción sustentable, así como la gestión de los recursos naturales y la adopción de medidas para combatir el cambio climático), Integridad, cambio climático, energía, sanidad, alimentos, resolución de conflictos y la administración del agua.
Karin Lexén, quien es el director del SIWI (Instituto Internacional de Agua de Estocolmo), declaró “…el agua, la línea de vida de nuestro planeta, será necesaria para lograr la mayoría de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (SDG) y para hacer frente a los retos que presenta el cambio climático…”. El agua, el cual es un recurso que en muchas ocasiones damos por sentado, será un tema alarmante para futuras generaciones y los únicos a los quienes podremos culpar será a nosotros mismos.
Una de las principales conclusiones a las que se llegó fue que el agua debe ser reconocida como uno de los agentes principales para implementar de forma exitosa la Agenda 2030, así como los acuerdos de Paris de diciembre pasado.
A lo largo de la semana, fue notorio el enfoque implementación y acción, sobre todo a nivel ciudad y local, marcando una transición de las discusiones globales que condujeron a la adopción de los SDG y los acuerdos realizados en la COP21 de 2015.
“…Nuestro ambiente marino está bajo un gran estrés. Todo lo que hemos dado por sentado para las futuras generaciones será casi imposible. 650 millones de personas no tienen acceso a agua segura, más de 2.5 billones de personas no tienen acceso a servicios mejorados de saneamiento y casi 900 niños mueren al día por diarrea o enfermedades relacionadas con el agua…” en palabras de la Princesa Victoria de Suecia en su discurso de clausura
Una de las declaraciones que más nos agradó fue la que realizó Karolina Skog, quien es Ministra Ambiental de Suecia, la cual mencionó: “… el agua es un recurso compartido y una responsabilidad compartida. El sector privado juega un papel importante ya que tiene la competencia, la tecnología y habilidad para invertir. El uso responsable del agua es una ventaja económica y dará sus frutos tanto para los modelos de negocio sostenibles y para las nuevas innovaciones…”. Skog, tiene razón, el agua es de todos y la responsabilidad no radica en unos cuantos.
“El cambio climático es el desafió que está enfrentando nuestra generación. Existe una gran necesidad por identificar los riesgos y vulnerabilidades que puedan existir. Si realizamos ahora medidas de prevención, será menos costoso que si realizamos medidas de reacción…”, declaró a los asistentes Skog.
En paralelo, Abdeladim Lhafi, quien es Alto Comisionado para la siguiente COP22 (Conferencia de las Partes en la Convención del Clima) se dirigió a los asistentes al momento de la clausura: “…la COP21 de París fue un punto histórico de inflexión, un éxito diplomático, fue una COP de decisiones, la COP22 será la Conferencia de la Implementación…”.
Consideramos que en ocasiones avanzamos de forma pausada, uno pensaría que para estas fechas los gobiernos de cada país que firmaron el acuerdo pasado estarían realizando acciones para estas fechas.
Durante la semana, otro tema que salió a relucir fue el clima y el poder aliviar la hambruna que está azotando en África. El Profesor Malin Falkenmark considera que el clima en este continente es su talón de Aquiles y argumentó que el almacenamiento de aguas pluviales y otros métodos de gestión de agua serán necesarios para aliviar el hambre de esta región y cumplir con los SDG. Junto con otros expertos del agua y clima, Falkenmark hizo un llamado para crear la iniciativa ‘Green Water Initiative in Africa’.
En un año se realizará nuevamente la Semana Mundial del Agua en Estocolmo y se centrará en el tema de “Agua y Desperdicio – Reduce y Reusa". Esperamos que este tipo de congresos logren iniciativas que sean escuchadas en los gobiernos de todo el mundo para actuar de forma local mundialmente.
Vía: http://www.siwi.org/ y www.worldwaterweek.org
Imagen: www.worldwaterweek.org