Desde niño los leopardos me han cautivo y se convirtieron en mis favoritos, junto con los gorilas y elefantes; aunque no he tenido el gusto de tener a ninguno de estos tres frente a frente los considero (como a todos) una belleza de la naturaleza.
Los leopardos son los grandes felinos con la mayor diseminación en el mundo ya que cuentan con un territorio que abarca Euroasia y África y lo mejor es que son capaces de vivir en cualquier parte; desde áridos desiertos hasta en la humedad de la selva; últimamente se les ha visto en las calles de las grandes ciudades.
Estos avistamientos son una alarma y quiere decir que estamos ocupando sus territorios. Se estima que del territorio que ocupaban a mediados de los años 50’s, los leopardos han perdido entre un 60% y un 90% de sus tierras, de acuerdo con un grupo de científicos de la revista Peerl. Uno de los grandes problemas que enfrentan los leopardos es que sólo un 17% de su territorio existente es protegido legalmente.
De acuerdo con Andrew Jacobson, quien es el autor principal y explorador de national Geogrpahic y quien colabora en la iniciativa “Grandes Felinos de la Sociedad”, los leopardos han disminuido en gran número sobre todo en África del Norte y occidental y casi han desaparecido en su totalidad en la Península Arábiga y China. En general su territorio se ha reducida de 35 millones de kilómetros cuadrado a tan sólo 8.5 millones de kilómetros cuadrados; lo peor es que 6 de las 9 subespecies del leopardo se encuentran en dificultades catastróficas.
El estudio de Jacobson es muy oportuno ya que este año la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN) cambiará el estatus oficial del leopardo y ahora se encontrará en la lista roja. Esto quiere decir que será inscrito como una especie “vulnerable”, incluso algunas subespecies podrían quedar marcadas como “en peligro” y en “peligro crítico”.
Luke Dollar, Director del programa Iniciativa Grandes Felinos de la Sociedad National Geographic, explica: “la naturaleza reservada de los leopardos, aunada a la aparición ocasional de animales individuales en ciudades grandes como Mumbai y Johannesburgo, perpetúa la idea errónea de que siguen prosperando en la naturaleza cuando, en realidad, nuestro estudio subraya que están cada vez más amenazados”… no porque los veamos en las calles quiere decir que estemos teniendo un boom de leopardos, más bien estamos entrando en sus terrenos y ellos están buscando su comida.
Si bien la pérdida de su hábitat es una de las grandes amenazas, también la persecución directa juega un importante papel, ya que personas sin criterio, con falta de una consciencia ambiental y una carencia de sinapsis a nivel neuronal, desde hace mucho tiempo el leopardo ha sido cazado por su piel manchada la cual actualmente es muy cotizada en algunas regiones del mundo. Lo peor es que la estupidez humana no conoce límites y aún hoy en día se celebran cacerías y torneos de caza.
Este estudio es un mensaje para todos nosotros, aunque no estemos directamente involucrados podemos ayudar al cambio. Apoyemos a las asociaciones de conservación internacional para que redoblen el apoyo a las iniciativas de protección. Cada acción que tomemos determinará el destino no sólo del leopardo, sino de miles de especies que están en peligro de extinción.
Imágenes: Steve Winter, National Geographic Creative
Vía: National Geographic