¿Les es familiar el nombre de Stuart Coleman? A quienes no lo puedan asociar con algún tema en particular, no se preocupen, las noticias medio ambientales no se propagan tan rápido como quisiéramos.
Coleman es un activista norteamericano que ha residido en Hawai hace más de dos décadas y en donde ha basado la mayoría de sus actividades. La más aplaudida y sonada fue lograr que Hawai fuera el primer estado de EUA en eliminar y prohibir las bolsas plásticas de las tiendas de autoservicio de dicho estado.
Recientemente la agencia de noticias EFE realizó una entrevista con Stuart acerca de los avances que se han realizado sobre este tema y enfatizó la necesidad de una mayor implicación de la sociedad civil y del sector privado para lograr la cura del medioambiente. Coleman, una persona que piensa igual que Planeta-2, donde vemos que somos el problema pero también la solución.
Stuart afirma que la campaña para reducir el uso de bolsas de plástico que comenzó hace un par de año es altamente efectiva ya que no es un esfuerzo monumental o crear reformas sino que inicia a nivel individual al rechazar el plástico y se convierte en un efecto avalancha; si cada persona comenzará a negarse a que nos entreguen en los super o cualquier otra tienda departamental la bolsa de plástico se dejarían de fabricar. Es hasta risible como las tiendas y supers se sorprenden ante la negativa de usar las bolsas de plástico, inténtenlo.
“Reducir las bolsas de plástico es el primer paso, es algo magníficamente sencillo que se puede empezar con una persona, una familia o un grupo de amigos. Cada una de estas personas representa 360 bolsas de plástico menos al año en el ambiente”, en palabras de Coleman.
Si bien el plástico es un invento moderno que está en todas partes del mundo, es un producto de uso y desecho casi inmediato; se consume en 15 minutos y se tira para quedar en el ambiente por décadas. Es aquí donde debe entrar nuestra conciencia, ¿por qué consumiré algo que desecharé en los próximos minutos y en cambio estará en la tierra por cientos de años? (dependiendo de la bolsa de plástico).
Para Coleman, esta iniciativa que está marcando pauta en Hawai puede hacer la diferencia, porque en vez de estar produciendo más desechos para después intentar reciclarlos es una labor más extensa y de cierta forma cansada, a que si optamos por no comprarlas, usarlas o pedirlas.
"El plástico no se degrada naturalmente, sino que se despedaza en partes y eso hace que los peces las confundan con alimento y pueden ser capaces de comer pedazos de plástico, eso significa que cuando se pesca ese animal, tiene tóxicos y químicos que vamos a terminar consumiendo nosotros", puntualizó Stuart.
"Cuando vemos atrás hablamos de la era del bronce, el hierro, la piedra y en 100 años esta va a ser la era del plástico, que va a cubrir todo. De aquí al 2050 va a haber más plástico que peces", dijo el estadounidense.
¿Recuerdan nuestro pie de página donde siempre colocamos una imagen de las 3r’s (reduce, recicla, reutiliza)?, Coleman dice que se debería agregar una cuarta “r” de “rechazo” a cualquier tipo de plástico y rediseñar el packing de los productos para dejar atrás esta era y se nos conozca como la era del
Si todavía no se convencen de la importancia de sus decisiones como nos explica Coleman, recuerden la “gran mancha de plástico del Pacífico” que es una isla flotante de basura y mide actualmente unos 700mil kilómetros cuadrados y se extiende entre la costa californiana, rodea Hawai y llega hasta Japón.