Soy una de las personas que tuvo la oportunidad de visitar las Islas Marietas hace unos años y la verdad es un lugar mágico lleno de vida y encanto, en donde puedes ver tortugas, manta rayas, pulpos, delfines y ballenas jorobadas o simplemente maravillarte con el espectáculo que son en sí las dos islas. Estas islas situadas en Nayarit, se formaron hace miles de años por la actividad volcánica de la región y al día de hoy permanecen inhabitadas.
Durante muchos años el gobierno mexicano utilizó estas islas como campo de bombardeo, (de hecho hay muchas cuevas y formaciones de roca inusuales debido a esta actividad), hasta que en 1960 y gracias al llamado internacional de Jacques Cousteau -una de las personas que consideró amó más la vida marina- el gobierno mexicano decidió nombrar a las islas como parque nacional y protegidas contra cualquier actividad humana, pesca o caza.
Ahora, ¿por qué el gobierno decide ponerle fin a las visitas de turistas a las islas? La respuesta es porque no sabemos cuidar nuestro patrimonio; tanto gobierno y empresas como sociedad civil. Lamentablemente no contamos con una cultura de preservación del medio ambiente y sólo se quiere consumir y tener una foto del recuerdo sin detenernos a pensar cómo estamos asfixiando este destino. Me tocó presenciar cómo las personas no tienen consideración por algo tan bello o no saben que están haciendo mal, o más bien no se siguen las indicaciones (por pocas que existan) ejemplos: para hacer snorkel o buceo se debe usar un protector solar que no contamine al igual que el repelente de moscos, tener cuidado con los corales y arrecifes ya que al tocarlos o golpearlos con las aletas se destruyen (no es como si no pasara nada), no llevarse el “recuerdito” de la piedra de las islas, no tocar la vegetación, entre otros.
Pero no sólo es la negligencia o descuido de los turistas, también las empresas y el gobierno juegan un papel importante. Las empresas de turismo sólo por tener una ganancia fueron inundando poco a poco de turistas sin informar a las personas sobre cómo cuidar el entorno de las islas, qué si se puede hacer y qué está prohibido, al ver las fotos que publicó la SEMARNAT es alarmante ver cuántas empresas existen para el mismo motivo, cuántos embarcaciones están esperando su turno para dejar descender a sus pasajeros. Y el gobierno es igualmente culpable por no regular a las empresas que se dedican a esto y por limitar las visitas a las islas; en vez de dejar entrar 3,000 personas por día (como sucedió en vacaciones de semana santa de 2016), restringir a sólo 200 personas por día; es más, se puede vender un boleto de tour a un precio mucho más elevado por ser un bien encarecido y limitado, oferta-demanda.
Considero que la restricción favorecerá al parque para que pueda retomar su esplendor de años anteriores y en caso de que se levante dicha prohibición, que el gobierno coloque un punto de control donde se vigile y respete los límites para navegar, de visita y accesos. Así mismo amable lector, si usted llega a visitar en el futuro las islas, por favor haga caso a las indicaciones y revise con anticipación cómo proteger este espacio.
Si quieres conocer más información accede a la SEMARNAT